martes, 20 de julio de 2010

¿Desastre natural?

Una de las noticias más recientes y que ciertamente ha afectado el ritmo de vida de mucha gente es el huracán Alex y todos los daños que dejó a su paso. Sin embargo, yo pregunto, ¿es correcto atribuirle a éste fenómeno natural toda la culpa?

Son incontables las situaciones en las que el ser humano ha subestimado a la naturaleza, incontables las veces en las que no ha mostrado el respeto que ésta merece y esta situación es una más. El huracán Alex no sólo dejó escombros a su paso, también dejó al descubierto la negligencia de muchas personas.

Esta negligencia se puede ver cuando se dio por sentado el hecho de que el río Santa Catarina no se había llenado desde 1988, y debido a esto, se tomó la libertad de construir en él, aun cuando la CONAGUA (Comisión Nacional de Agua) era la encargada de vigilar tales acciones. Según Martínez Berlanga, Comité Ecológico Probienestar, estas construcciones ayudaron a la destrucción de las dos avenidas principales de Monterrey.

El río Santa Catarina y la imprudencia de construir ahí es sólo una parte, ya que también están las viviendas que fueron destruidas. En el caso de las viviendas destruidas, muchas de estas estaban construidas sobre terrenos no aptos para tales fines, y el gobierno ha confirmado esto al dar a conocer que 7,378 de 20,447 de las viviendas dañadas estaban en zonas irregulares.

Con tal información en nuestras manos es necesario que se reconozca que esto no se le puede denominar enteramente “desastre natural”, porque el ser humano también tuvo gran culpa. Asímismo, se deberán tomar medidas para evitar que un verdadero desastre natural cause más daños de los que realmente debería. (Checatelo.com)

Escrito por Mirna Elizabeth García Torres, LEM.

viernes, 16 de julio de 2010

Panorama de PEMEX

Luego de que el secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, pronosticara hace unos días que el número de denuncias penales por actos de corrupción para el 2010 va a aumentar e incluso llegará a una cifra record, es inevitable mirar hacia la empresa pública más grande del país: PEMEX.

PEMEX ,en su reporte anual más reciente, vuelve a demostrar el gigante que es al tener ingresos de alrededor de 1090 MMP, que al restarle los costos de producción y otros gastos, resulta una utilidad cercana a los 540 MMP, es decir, que obtiene una utilidad del 50% de todo lo que vende. Pero así como es la empresa número 1 de México en la generación de riqueza, también es la empresa número 1 en denuncias por actos de corrupción.

¿Qué sería de México sin PEMEX? Toda esta cuestión de corrupción aunada a los significativos préstamos que PEMEX pide es el lobo que está soplando y soplando hasta que la casa se caiga. Sin embargo, a pesar de que la corrupción en PEMEX es bien conocida, pocas medidas se están tomando al respecto. Si el paquete PEMEX es tan grande que la directiva actual no lo puede soportar, es hora de que alguien más tome cartas en el asunto.

La privatización podría ser una opción, pero este tema ya está muy debatido. Otra cosa que tomar en cuenta son los bajos costos de producción de PEMEX, que se deben a la naturaleza de que en efecto PEMEX es una empresa pública. Por lo cual, lo más viable es un cambio de manos en la dirección de este coloso petrolero.

La corrupción se tiene que acabar o disminuir pronto, ya que sus consecuencias podrían resultar en el definitivo hundimiento de PEMEX. La corrupción en la empresa más importante del país es inadmisible. En palabras de Elizabeth Yáñez Robles, subsecretaria de Atención Ciudadana y Normatividad, “es totalmente injustificable e inaceptable que con las condiciones que tiene el país haya funcionarios públicos que se atreven a tomar un peso del presupuesto, cuando tenemos 50 millones de pobres que esperan programas de apoyo, infraestructura y de salud, entre otros”.

Escrito por Mauricio Alejandro Valdés Galván, LAE.

miércoles, 7 de julio de 2010

Aserraderos: ¿una industria sustentable?

Si alguna vez han visitado la Sierra Tarahumara, se habrán dado cuenta de la riqueza natural que encierra la región. Es un oasis rodeado por montañas, lagos y bosques de belleza inigualable. Por siglos, los rarámuri o tarahumaras han explotado los recursos naturales de estas tierras para obtener las herramientas necesarias para sobrevivir a los crudos inviernos que hostigan a su pueblo y a las altas temperaturas del verano, todo esto sin causar un impacto negativo en la región.

Tras la llegada del ferrocarril, se instalaron múltiples aserraderos en la zona. Tuvieron un gran éxito gracias a la demanda nacional e internacional de la madera de pino, la cual tiene un amplio rango de usos que van desde la construcción hasta la leña para combustión. Recientemente, algunos de los aserraderos cerraron debido a la escasez de madera utilizable, es decir, árboles de entre 60 y 80 años. Mientras tanto, los demás aserraderos continúan abiertos, algunos de ellos funcionan con madera clandestina que, además de carecer de los permisos necesarios, tiene entre 25 y 30 años.

Aunado a los problemas ecológicos, está el problema de los desperdicios. El 80% de los aserraderos del estado de Chihuahua cuenta con equipos e instalaciones de 1940 que no han sido renovados ni modernizados, lo cual hace que de cada árbol sólo se aproveche el 30%. Es una aberración que se desperdicie el 70% del un árbol en México, tomando en cuenta que países como Chile, Finlandia y Estonia sólo desperdician el 2.2%.

Como resultado, la madera de pino mexicana ha perdido competividad en el mercado nacional. Países como Brasil, Chile y Canadá ofrecen madera de calidad similar a una fracción del precio de la madera mexicana. Los aserraderos de Chihuahua y Durango ahora se ven obligados a competir con un producto de menor calidad debido a las técnicas obsoletas de manufactura, contra un producto de calidad superior cuyo precio es hasta 25% menor.

Espero que, como resultado, los aserraderos del norte del país mejoren sus sistemas productivos y de calidad con el fin de mejorar la competitividad de los productos mexicanos. Esto traería grandes beneficios ambientales a la región, los cuales se verían reflejados en el desarrollo económico de sus habitantes. En cuanto a la tala ilegal de árboles, al ser una zona tan grande, la SEMARNAT debe mejorar las regulaciones y buscar tener un mejor sistema de control para aminorar el deterioro ambiental y poder lograr un aprovechamiento industrial sustentable.

Escrito por Rubén Velázquez Treviño, LIN.

lunes, 5 de julio de 2010

Quién ganó y quién perdió

Las elecciones del pasado 4 de julio han cambiado el panorama partidista del país, pero no debemos dejar que la prensa nos convenza de que sólo hay una manera de verlo. Sí, han ganado coaliciones de la oposición en estados que, como Sinaloa y Oaxaca, previamente siempre habían sido una fuente, al parecer inagotable, de votos para el PRI, así como en Puebla, el cuarto electorado más grande del país. La otra cara de esta moneda es que además de perder las gubernaturas de estos tres estados, el PRI recuperó las de tres estados que ya habían pasado a la oposición: Zacatecas del PRD, así como Aguascalientes y Tlaxcala del PAN.

Es difícil pensar que estos son triunfos reales para la oposición, cuando estados como Tamaulipas y Veracruz siguen viviendo el México de antes de 2000. El PRI no debería ser un partido indispensable; como en Tamaulipas, donde mataron al candidato priista y tuvieron que reemplazarlo con su hermano. Según encuestas realizadas por Milenio Noticias, el 66.2% de los tamaulipecos dijeron que el asesinato del candidato no afectaría su voto. No estoy justificando que se retiren candidatos de esta manera no democrática, pero creo que el partidismo no debería llegar a niveles en los que a las personas realmente no les importa lo que el candidato en sí hará por ellos. Como lo demuestra el PREP de Tamaulipas, probablemente sólo votan por un partido que les gusta sin preocuparse por las implicaciones. Al mismo tiempo, el virtual ganador de la contienda electoral por la gubernatura de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, confirmaba a la prensa que el PRI tendría mayoría en el congreso del Estado después de un PREP con “datos contundentes e irrefutables”. Es difícil que no sean irrefutables, después de todo, el actual gobernador Fidel Herrera muy probablemente se aseguró de ello.

Además de esto, no hace daño saber un poco más sobre los candidatos de la oposición que están ganando en estas elecciones:

- Mario López Valdez, candidato de la alianza PAN-PRD-Convergencia a la gubernatura de Sinaloa, es Licenciado en Contaduría por parte del Instituto Tecnológico de Los Mochis; apenas se desprendió del PRI para unirse al PAN en marzo de este año.

- Gabino Cué Monteagudo, candidato de la alianza PAN-PRD-Convergencia-PT a la gubernatura de Oaxaca, es Licenciado en Economía por parte del ITESM. Además cuenta con una maestría en Dirección Económica-Financiera por el Instituto Directivo de Empresas de Madrid y un doctorado en Hacienda y Economía del Sector Público por la Universidad Complutense de Madrid. Ha sido miembro del partido Convergencia desde 1994 y esta es la segunda vez que es candidato de una alianza opositora del PAN-PRD-Convergencia.

- Rafael Moreno Valle Rosas, candidato de la alianza PAN-PRD-Convergencia-PANAL a la gubernatura de Puebla, fue miembro del PRI hasta 2006, cuando fue elegido senador para Puebla con el PAN. Es Licenciado en Economía y Ciencia Política por parte del Lycoming College, así como Licenciado en Derecho por parte de la Boston University School of Law.

"Quién gana, quién pierde". [Milenio Noticias]

Escrito por Francisco García González, LRI.

domingo, 4 de julio de 2010

Una razón más

Es un secreto a voces que en México es difícil tener un proceso correcto de democracia. Esto se debe a diversas razones: apatía a votar de una gran parte de la población, políticos corruptos, manipulación del conteo de votos, etc. Los mexicanos no necesitamos una razón más para que este proceso no pueda llevarse a cabo de la manera correcta, sin embargo, he aquí una razón más: el asesinato de un candidato a una gubernatura.

El 28 de junio de este año se dio a conocer la noticia de que Rodolfo Torre Cantú, candidato a la gubernatura de Tamaulipas por parte del PRI, fue asesinado a causa de un ataque de fuego a sólo 6 días de las elecciones en dicho estado. (Milenio Noticias)

Es inevitable que este tipo de evento cause una desesperanza en todas aquellas personas que ya estaban decididas en entregarle su voto a tal candidato, ahora que él no está ¿A quién le darán su voto? Puede que encuentren otro candidato que también crean merecedor de su voto o puede que no lo encuentren y anulen su voto. De una manera u otra estas personas han perdido a su primera opción, han perdido el candidato que ellos creían que merecía la gubernatura. ¿Cómo no perder la fe en la democracia mexicana?

Hay muchas conjeturas acerca de la razón de su asesinato, pero sin importar cuál sea, lo cierto es que su muerte modificó el proceso de democracia: se está quitando un candidato de una manera no democrática. Sería un poco más tranquilizador que éste fuera un caso aislado, pero es de cultura general que no lo es. Ya es difícil llevar unas elecciones transparentes aquí en México, no hay motivo para agregar otra dificultad.

Escrito por Mirna Elizabeth García Torres, LEM.

viernes, 2 de julio de 2010

Cuando los niños querían ser narcos

Acabo de leer un reportaje indignante, más bien como una bofetada al futuro de nuestro país. Que los niños ya no sueñen con ser médicos, aviadores, veterinarios o superhéroes… sino narcotraficantes. Esto es verdaderamente decepcionante y desalentador. Con este tipo de pensamientos por parte del “futuro de México”, no importan las políticas en materia de seguridad ni las reformas económicas y de educación que el país lleve a cabo; México está perdido. No importan los esfuerzos del ejército y del Gobierno Federal por terminar con la guerra, y claramentee no importan las personas que han perecido por nuestro país.

Este tipo de noticias te hacen abrir los ojos. Te hacen darte cuenta de que, en efecto, la guerra contra el narco no tiene solución a corto plazo; y definitivamente tampoco a largo plazo si los niños quieren ser narcos cuando crezcan. Te hace confirmar que la única forma para vencer en ésta guerra es con una verdadera educación moral. Aquella educación que no se puede dar en la escuela ni en la iglesia y mucho menos en la calle. Sólo en el núcleo familiar los niños pueden recibir esta educación.

Aquí hay callejón sin salida. ¿Cómo pueden dar las familias educación moral de calidad a sus hijos sin un empleo digno y bien pagado, que les de el bienestar que tanto necesitan? Y si el narcotráfico es la fuente de trabajo más abundante y mejor remunerada del país, ¿dónde queda la moral? La moral no te va a dar de comer, e incluso los niños ya se dieron cuenta de eso. (Reuters).

Escrito por Adrián Francisco Cavazos Vázquez, LIN.