martes, 23 de marzo de 2010

No pido confianza ciega, pido unión

Dado los hechos que tuvieron lugar el pasado 19 de marzo se han generado centenares de opiniones y posturas. Lo que más ha llamado mi atención es la tendencia general a buscar culpables, culpables entre nosotros mismos.

Me ha generado una gran contradicción el ir caminando y escuchar: “El Tec defiende más su imagen que a sus estudiantes”, “Los militares sabían que eran estudiantes y no sicarios”, “El gobierno quería ocultar la muerte de los estudiantes”, etc. ¿Qué es esta actitud que domina a la mayoría de la población?, ¿Por qué ese afán de obviar el problema real?

El problema no es el Tecnológico, ni los militares, ni el gobierno; el culpable es el narcotráfico, el crimen organizado. Ya que, en primer lugar, los primeros mencionados no se verían involucrados en tales situaciones si el narcotráfico no hubiera llegado a tener el poder (sí, el poder) que ahora tiene.

Y no, tampoco debemos culpar al gobierno de que el narcotráfico haya llegado hasta donde está. La culpa es de todos, ya sea por haberte quedado callado, por haber ignorado acontecimientos o por haber manejado una doble moral como quejarse del narcotráfico al mismo tiempo que se mantienen amigos abiertamente relacionados con él. Además, ¿de qué servirá echar culpas?, ¿eso resolverá la inseguridad en la que ahora vivimos?

Unámonos. Me produce gran orgullo ver que la comunidad universitaria se ha consolidado, pero esta solidaridad no debe estar sólo entre nosotros, debe extenderse. Nosotros como universitarios podemos alzar la voz, pero hasta ahí; si alguien puede hacer más es el gobierno, pero también necesitan de nuestra ayuda.

Estoy consciente de lo inocente e ingenua que suena esta propuesta, estoy consciente que el país se caracteriza por ser corrupto; pero también estoy consciente de esto: esta situación es extraordinaria, es algo que se salió de control y que es obvio que a nadie le gusta. Nadie quiere este México.

No miremos entre nosotros o a nuestro lado, miremos hacia adelante; dividamos esto entre ellos y nosotros, no entre varios grupos de nosotros contra ellos. No pido confianza ciega, pido unión.

Escrito por Mirna Elizabeth García Torres, LEM.

1 comentario:

  1. Estoy totalmente de acuerdo, aun que suene un poco trillado: La unión hace la fuerza.

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